Lo que Dice la Gente en Quintana Roo

lunes 28 abril 2025

Luis Mis-Héctor Cobá-Ernestina Mac Donald-Armando Castillo

“DONDE NO SE RESPETAN LOS DERECHOS, LA SOCIEDAD SE DESMORONA”: ADVIERTE JOSÉ FRANCISCO AGUILAR, CANDIDATO A MAGISTRADO FEDERAL

Por Héctor Cobá

La propuesta de una justicia clara y entendible para todos, siempre con perspectiva crítica de la sociedad, cómo mejorarla y poder ayudar, la transmisión de nuestro mensaje debe ser lo más claro posible, si los derechos no se cumplen la sociedad se quiebra; la campaña para la renovacion del Poder Judicial tiene trasfondo social, cultural, económico y de entendimiento de la propia gente, así presento mi candidatura con ideas claras afirma el aspirante a magistrado José Francisco Aguilar Ballesteros.
El postulante al cargo de magistrado de Circuito por el vigésimo séptimo Circuito en Quintana Roo responde a la entrevista, y recalca que en la judicatura se debe erradicar el problema del nepotismo vigente, la desigualdad en las oportunidades; hay que brindar la oportunidad a compañeras para que se proyecten, en un mayor número como secretarias de estudio, como magistradas, es un tema fundamental.
 
¿Los casos de la sensual candidata (Lulú Ríos: Chihuahua) y del ministro Chicharrón (Aristides Rodrigo Guerrero García: Ciudad de Mexico) empañan la seriedad de una eleccion que pretende cambiar el modo de tener magistrados y jueces que van a aplicar las leyes?

La manera de cada candidato de presentar sus propuestas es absolutamente individual. Nosotros vamos a presentar las nuestras, cada quien lo hará conforme a su trayectoria, a su expertise, a su visión que tienen que tenerse la Judicatura. Cabe decir que además no estamos legalmente facultados para hacer críticas, observaciones o también para apuntalar alguna propuesta diversa a la propia. En este caso yo me voy a enfocar a las ideas que quisiera transmitir a todo el electorado para que puedan votar por mí, conocerme y votar por mí.
 
¿Cómo familiarizar, interesar a la población quintanarroense con los perfiles profesionales y humanos de las personas que participan en esta inédita campaña y elección de funcionarios judiciales?

Es un reto extraordinario lograr que la población en general se interese por el trabajo jurisdiccional; la labor técnica que desarrollamos, sin duda, se encuentra alejada de las personas. Sólo en ciertos casos de mucha trascendencia, desatan el interés de la gente.

En este caso, creo que el reto y la perspectiva de esta elección judicial es que la Judicatura se aclara, y en ese sentido mi eslogan sería que si los derechos no se cumplen la sociedad se quiebra, ese tiene que ser el mensaje. Tiene la fortaleza de los derechos de las personas y el cumplimiento exacto de la ley, brindando certeza jurídica para todos.
 
A los 25 años usted tuvo su primera responsabilidad, y el pasado abril cumplió 22 años de iniciar sus labores en la función jurisdiccional dentro del Poder Judicial de la Federación. Su inicio lo marca la transición democrática tras 71 años de mandato en la Presidencia de la República por el PRI, desplazado este por el PAN con Vicente Fox Quesada al frente, en el año 2000. Quien por la falta de mayoría legislativa dejó en el tintero importantes reformas estructurales y constitucionales; otras como la reforma tributaria sí vieron la luz, sin dar los frutos esperados; el nuevo marco jurídico para Chiapas, la Ley sobre Derechos y Cultura Indígenas dejó insatisfechos a los insurrectos zapatistas. Si hubo crecimiento económico, ligado a la coyuntura en Estados Unidos (George Bush) y a los precios del petróleo acompañado de salud financiera, estabilidad cambiaria y una inflación bien baja, ¿ese trayecto histórico, social y económico justifica la actual campaña y elección de funcionarios judiciales?

Sí, el devenir de las reformas constitucionales, del entendimiento jurídico, las nuevas herramientas jurídicas, el reconocimiento de los derechos humanos, la incorporación de los procesos orales, el boom que ha tenido los derechos humanos y el respeto al debido proceso. Todo esto tiene un trasfondo este social, cultural, económico y de entendimiento de la propia gente.

Ahora la nueva reforma exige que los jueces, magistrados y todos los funcionarios que estamos dentro de la función jurisdiccional demos la cara a la sociedad, le hablemos de frente, conozcan nuestras propuestas, y con ello podamos legitimarnos, esa es la perspectiva y verdaderamente la sustancia de la Reforma Constitucional a la que debemos responder sin cortapisas, de manera franca, valiente y procurando ser lo más claros posibles en la transmisión de nuestro mensaje, ese es el reto para todos los abogados que estamos en la función jurisdiccional.
 
De 1978 a 2023 hay hechos históricos trascendentes en Mexico, antes y despues, el movimiento universitario de 1968, la represión de 1971, el movimiento zapatista de 1988 que ensombreció la entrada al neoliberalismo económico, la debacle priista en la ultima decada del siglo XX, y muchos acontecimientos más, ¿se considera usted hijo histórico mexicano, influyó eso en su formación y quehacer como funcionario judicial sus primeros 10 años de trabajo?    

Cualquier funcionario jurisdiccional tiene que entender el contexto jurídico en el que desarrolla su trabajo; sin embargo, la aplicación de políticas públicas, de las normas no nos compete en estricto sentido estar de acuerdo con ella, sino siempre juzgarlas a partir de un marco, en nuestro caso como jueces constitucionales, un marco normativo y con una metodología acorde a criterios y siempre privilegiando que la Constitución sea la norma fundante y, por supuesto que todo este devenir histórico y de transición nos ha impactado, me ha impactado en lo individual, pero creo que la función de nosotros es siempre ir a la par del entendimiento este político, que no nos corresponde propiamente juzgarlo sino entenderlo y estructurarlo a partir de nuestras resoluciones, la solución de controversias siempre de manera imparcial y en estricta aplicación a la ley.
 
En medio de ese devenir histórico, del que hablamos, en el caso personal, ¿antes de decidirse a las cuestiones de derecho, de tomar la decisión de agarrar ese camino ¿qué “coqueteó” antes con el joven José Francisco?

De no haber optado por estudiar la carrera de Derecho y desempeñarme en la función jurisdiccional me parece que hubiera sido de mi más completo agrado dedicarme a la sociología y también a la literatura y a la filosofía. Creo que las humanidades para mí siempre han significado algo verdaderamente interesante y en lo que yo puedo aportar.
 
Siguiendo por ese camino ¿recuerda usted cuándo descubrió que le interesaba realizar labores inherentes al derecho?

Vengo de una familia de abogados, mi papá es abogado, mi abuelo también lo fue, estudió en la Escuela Nacional de Jurisprudencia, tengo tíos, abuelos abogados; en fin la tradición jurídica y de leyes en mi casa, en mi seno materno, ha sido quizá lo que me resultó identitario y ya joven pienso la perspectiva crítica que siempre tuve de la sociedad y cómo mejorarla y poder ayudar fue tomando el rumbo de las leyes y del entendimiento de nuestros problemas sociales para poder contribuir en una solución para todos.
 
De manera formal ya inició la divulgación de sus trayectorias en esta campaña y contienda electoral por cargos dentro del Poder Judicial ¿en su caso cuál es el camino a seguir?

La respuesta de Aguilar Ballesteros refiere
El camino que tengo es presentar mi candidatura con ideas claras, siendo, por supuesto, crítico con las cosas que tenemos que erradicar en la Judicatura; pienso que el problema del nepotismo sigue vigente el tema de la desigualdad en las oportunidades; pienso que brindar la oportunidad a compañeras para que se proyecten, en un mayor número como secretarias de estudio, como magistradas sigue siendo un tema fundamental.

Poner de relieve estos problemas desde, insisto, una perspectiva crítica; sobre todo, hacer asequible la justicia y sus conceptos a la gente. Sin duda es el reto que tenemos todos los abogados, transmitir ideas claras para que la gente sepa cuáles son sus derechos, cuál es nuestra función y por qué es importante siempre el trabajo jurisdiccional; para que los derechos se cumplan, se fortalezcan y la sociedad se mantenga en paz.

¿En este paso de la renovación del Poder Judicial, cómo puede entender cada votante la sensibilidad del juzgador con base en la formación del segundo?

Me parece que esto es un ejercicio inédito, mostrarnos como candidatos, a partir de currículums y trayectorias, creo que difícilmente puede revelar la identidad y la sensibilidad; digamos en lo en en lo más intrínseco de cada uno de nosotros. Creo, sin embargo, que el trabajo que hemos formado con nuestros equipos, las resoluciones que hemos dictado, la manera de conducirnos, pienso que es la forma en la que el votante pueda darse una idea de nuestros perfiles. Creo que el conocimiento técnico y preciso de la Judicatura es fundamental; y es uno de los elementos en que la ciudadanía tendrá que tener más atención sobre la popularidad o sobre pues alguna campaña pegajosa. Porque esto sí puede ser muy engañoso y esos perfiles lamentablemente el día que se encuentren de frente al ejercicio de la jurisdicción, van a percatarse de que es una labor muy compleja y de extrema responsabilidad.
 
En ese mismo tenor, ¿se justifica una elección abierta para ocupar el cargo de magistrado de Circuito, si antes era una selección entre pares y colegas junto con un examen de conocimientos?

A mi juicio, eso no está en duda, la reforma constitucional es un mandato de la gente y es algo que todos tenemos la responsabilidad de entender, de instrumentar y participar.  Y su justificación me parece que se da para sanear el Poder Judicial de muchos de sus vicios. Aquí habría que hacer una distinción entre la Judicatura local y la Judicatura Federal, mucho se ha hablado de ella, pero en ambas sedes, en lo federal y en lo local, pues hay mucho por avanzar y, lo primero que tenemos que hacer es ser transparentes, estar de cara a la sociedad y siempre proponer una justicia clara y entendible para todos.
 
En su caso, ¿cómo explicar al ciudadano común y corriente en palabras sencillas, la función de un magistrado en materia mixta que ve todo, muchos asuntos, no defienden los casos si no los resuelve?
 
La función de un magistrado de circuito como órgano terminal de los procesos jurisdiccionales involucra, en muy pocas palabras, el análisis final de los casos y la amplitud con la que tiene que reconocerse un derecho fundamental de las personas. Esto es, la labor del juez constitucional involucra analizar a jurisdicciones especializadas, actos de autoridad, normas, leyes y un sinnúmero de casos, pero desde un análisis estrictamente técnico y amplio, en el que se definan los alcances de una norma en la que se contiene un derecho fundamental como podría ser la libertad, la propiedad, el trabajo. Esa es nuestra labor,  brindarle al alcance un justo entendimiento a esas normas que contienen esos derechos y a los procesos en los que estos se ven inmersos para dar siempre la respuesta más justa a los justiciables, a todos los gobernados.
 
Hablando de temas técnicos ¿qué es la función jurisdiccional?

La función jurisdiccional es un servicio público, gratuito que todos los estados democráticos deben brindar a las personas para que resuelvan a sus controversias, y se produzcan cambios sociales adecuados en el entendimiento de los derechos de las personas.
Eso involucra la función jurisdiccional, mantenerse, por supuesto, siempre no ajeno a los problemas, pero sí mediando entre el entendimiento de dos partes en un conflicto, nuestra labor es encontrar siempre la mejor respuesta a una problemática social, económica, familiar o de Derecho Penal. Esa es nuestra labor.
 
Su trabajo lo  ha llevado a Campeche, Oaxaca, Yucatán y Quintana Roo en ese rubro, en esos puntos ¿considera hay la posibilidad que el votante no tenga claro qué es un candidato a tribunal colegiado?

He laborado como secretario de juzgado en Campeche. Y en las jurisdicciones que se mencionan, en Oaxaca y en Yucatán he fungido como magistrado en funciones, en suplencia de algún titular, sólo en algunos casos; fundamentalmente mi trabajo se ha desarrollado aqui en Quintana Roma y, por supuesto, la gente se preguntará ¿que es un Tribunal Colegiado o para qué sirve?

Sin duda es complejo explicarlo, pero nosotros estamos encargados en última instancia de revisar todos los actos de autoridad, que la aplicación que se haya tenido en procesos administrativos, jurisdiccionales o de cualquier otra índole que sean de nuestro conocimiento, siempre tengan una proyección justa razonada y en beneficio de las personas para maximizar sus derechos.
 
Lleva más de 20 años en la función jurisdiccional, ¿se siente con ventaja sobre sus colegas de menos años de experiencia y en desventaja con sus congéneres que rebasan las tres décadas de ejercicio?  

Pienso que mi trayectoria es personal y que la he construido a mi manera y ahorita me encuentro, creo que en el mejor momento para desempeñarme en la función jurisdiccional. Actualmente soy magistrado en funciones en el primer Tribunal Colegiado del vigésimo circuito y creo que toda la trayectoria y la experiencia que ha acumulado me ha permitido en estos meses desempeñarme a la par de mis colegas magistrados y organizar y estructurar una ponencia de la mejor manera posible. Siempre dedicándole tiempo a otros colegas que empiezan en la función jurisdiccional.

Orientándolos e instruyéndolos y regresando algo que es muy importante que es la formación artesanal del funcionario judicial, esta es la clave, transmitir entre alguien que tiene mayor experiencia con alguien que no la tiene. Transmitir la sensibilidad de juzgar, esto es importantísimo, esto es algo que en las universidades no dan. Esto es algo que el Instituto, los institutos judiciales tampoco proveen. Es una labor, a veces olvidada por otros jueces y magistrados. Es decir, que no le dediquen tiempo a su personal que no estén con ellos, que no estén al pendiente de su crecimiento de desarrollo. Además, esto es algo que yo llevo haciendo ya, prácticamente toda mi carrera y ahora como magistrado en funciones lo hago con todo mi equipo de trabajo, desde los secretarios hasta los oficiales y siempre mi puerta está abierta para discutir asuntos y resolver problemas.
 
¿Las responsabilidades asumidas de secretario de tribunal, secretario de juzgado, o actuario judicial y de secretario en funciones de magistrado le da el bagaje profesional e histórico para fungir como magistrado de cicuito?

Esta trayectoria me parece que me da las herramientas técnicas, el conocimiento, la experiencia que es fundamental para desarrollar la función; he comentado siempre con colegas y ahora con el personal a mi cargo que la diferencia entre un grado de responsabilidad y otro, además de la capacitación. Sin duda es la experiencia, de los años de experiencia que se toman para lograr desarrollar plenamente la función; por ejemplo, un juez, un magistrado ve impresionantemente cerca de 100 casos por semana, mientras un secretario ve 10 y un oficial ve dos o tres, en esa medida y con esa proyección la experiencia que se adquiere en grados altos de responsabilidad sencillamente es exponencial.
 
Usted es doctorante en derecho, ¿su tesis de grado la enfocará en su particular especialidad y preferencia por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, como la de licenciatura y de maestría?

Claro que sí, en todos mis trabajos académicos he tenido como punto en común, un denominador, la función jurisdiccional; mi tesis demaestría y mi tesis de licenciatura tienen que ver con una justificación en los momentos particulares en los que trabaje en ellas. Por ejemplo, la de licenciatura fue una justificación incipiente inicial de la Suprema Corte como Tribunal Constitucional, mientras que la que elabore en la maestría tenía que ver ya con su conserva consolidación, el trabajo que estoy desarrollando actualmente en tesis doctoral, por supuesto que también tiene que ver con la función jurisdiccional que tanto me apasiona.
 
De una ponencia que está trabajando y es para intercambiar con otros candidatos con una discusión para exponer dónde.

La ponencia de la que yo hablaba las ponencias entienden como grupos de trabajo al interior de tribunales. Eso es una ponencia. Una ponencia es un equipo de trabajo en los tribunales hay interés ponencias y cuyo titular es un magistrado de circuito de carrera y por concurso de oposición o como en mi caso, un secretario en funciones de magistrado que somos electos o designados por necesidades de servicio y por el reconocimiento a nuestras trayectorias. A eso es a lo que me refería.
 
Para cerrar y en este caso que ustedes son unos candidatos en forma para un cargo dentro de la estructura del Poder Judicial de todo el país y en el caso específico de Quintana Roo, ¿cómo hacer para este familiarizar estrictamente zonas alejadas de las los ámbitos urbanos en Quintana Roo y en Benito Juárez en particular?

La comunicación institucional que el Poder Judicial de la Federación y sus integrantes tiene que tener me parece que está en ciernes, es un desarrollo, es un ensayo, estamos trabajando en modelos comunicativos eficientes y desde nuestra sentencias; por ejemplo, es una obligación para nosotros elaborarlas con el modelo de lectura fácil cuando se trata de niños o de personas con alguna discapacidad. Hubo problemas de entendimiento y esa es la manera en la que nosotros podemos acercarnos a las personas y por supuesto también aquellos que no.
 
Entre las cosas que ustedes pueden hacer como candidatos ¿se autorizó en algún momento un debate como se hace por los puestos políticos candidatos?

Sí, el INE -Instituto Nacional Electoral- ha desarrollado pautas y lineamientos para que los distintos candidatos puedan debatir sus ideas en foros y mesas y discusión. Esto sin duda, es algo que a la ciudadanía le va a resultar interesante.

Quizá quitando el entendimiento y la perspectiva esta técnica, francamente es un reto expresarlo, traducirla en palabras comunes, entendimiento, creo que nuestros debates técnicos tienen que quedarse para foros especializados y me parece que no deben ser parte de un modelo de comunicación con los votantes en general.
 
¿Algo más que añadir?

Este proceso de elección de jueces y magistrados es un reto y es una invitación a toda la sociedad para que conozca nuestra función. Se involucre con sus derechos y. Y para que nosotros podamos lograr transmitir la importancia de defender los derechos de consolidarlos y de exigir su respecto a todas las autoridades en beneficio de todos y con el fin específico de lograr paz, social y progreso y beneficio para todos.
 
Informacion INE

Asimismo, el  -Instituto Nacional Electoral (INE) en su apartado: Conóceles para la elección de integrantes del Poder Judicial de la Federación, cada aspirante da respuesta a preguntas en la Ficha de la persona candidata, que en el caso de Jose Francisco Aguilar Ballesteros contesta:
¿Por qué quiero ocupar un cargo público?
Estoy comprometido con la función judicial y una sensibilidad social arraigada, mi magistratura en beneficio de todos.
 
Visión de la función jurisdiccional

Considero que la judicatura, históricamente influida por intereses corporativos, ha favorecido a minorías en detrimento de la mayoría, minando su legitimidad social. Es urgente reestructurar el Poder Judicial para convertirlo en un ente dinámico y sensible a las demandas colectivas, que priorice la protección de derechos fundamentales. Esta transformación exige jueces que, sin renunciar a la independencia, actúen con rigor y compromiso para alcanzar un orden social justo. Ese es mi compromiso.
 
Visión de la impartición de justicia

Como Juez, asumo el compromiso de transformar la judicatura en un instrumento de justicia social y legitimidad democrática. Considero que mi labor debe trascender el tecnicismo para garantizar la protección de los derechos de grupos vulnerables y la resolución ágil de conflictos. Mi visión es fundamentar la función judicial en criterios dinámicos y adaptativos que impulsen equidad, paz y desarrollo integral de la sociedad, asegurando que cada sentencia responda a las necesidades del bien común.

Principales propuestas
 
Propuesta 1
La función judicial debe reorientarse hacia la plena incorporación de un modelo de justicia social, en el cual la independencia y el rigor técnico se conjuguen con una sensibilidad especial hacia los derechos de las mayorías y los sectores vulnerables. Este nuevo paradigma debe implicar una transformación estructural en la revisión de actos de autoridad, promoviendo la eficiencia procesal, la resolución ágil de conflictos y la generación de criterios jurisprudenciales justos y eficientes.
 
Propuesta 2
Romper con prácticas arcaicas y proyectar derechos colectivos, adoptando mecanismos innovadores para la revisión de actuaciones estatales y la protección de los grupos marginados. Se requiere un Poder Judicial ágil, transparente y sensible a los reclamos sociales, capaz de generar criterios que respondan a las exigencias democráticas actuales, consolidando la confianza ciudadana y promoviendo el desarrollo armónico del orden social. Con rigor y convicción.
 
Propuesta 3
Propongo la transformación de la función judicial en un ente proactivo que, sin renunciar a su independencia, asuma la misión de ser motor de cambio social. Se debe fomentar una praxis jurisdiccional que trascienda el formalismo, integrando una revisión profunda de los actos de autoridad y la aplicación de criterios que prioricen la equidad y el respeto a los derechos humanos. Este modelo exige la formación continua y el compromiso ético para construir un sistema justo y eficiente.